Nostálgica, Lady Gaga se despide de México.

Ya un líder religioso había dicho: México siempre fiel, y no era para menos con Gaga. Puedo decirles, desde mi experiencia, que el concierto es alucinante y que reafirmó mi creencia de que Gaga es una gran artista, por acá dejo más información sobre su visita y partida de México:

The Monster Ball Tour, con el cual Lady Gaga le dio la vuelta al mundo, llegó a su fin el viernes, y ella, incrédula, no sabía si llorar por la nostalgia o por la emoción.

Ante la amenaza de tormenta, que nunca llegó, y frente a 55 mil fans que jamás dejaron de aplaudirle y las más de 60 personas que la acompañaron en el recorrido internacional, la neoyorquina cedió a su parafernalia para mostrarse dócil y sensible en el Foro Sol, la noche del viernes, durante su segundo y último concierto en el DF.

"Jamás pensé que, tras haber iniciado este pequeño show en Nueva York, terminaría aquí, ante más de 50 mil personas, con el Monster Ball Tour en su apogeo, haciéndome sentir grande, pasional, monstruosa.

Este es el último show de la gira, y lo más humilde y más sencillo que les puedo decir, de todo corazón, es 'gracias'", externó la cantante, compositora y productora, al borde de las lágrimas.

Y con sus fans mexicanos como testigos de lo que hizo en las dos horas de espectáculo, Gaga se arrojó al piso, gritó, cantó, bailó, se tocó la entrepierna provocativamente, le pidió a sus bailarines que simularan escenas sexuales y autoestimulación.

Y suplicó por un hombre y por toda su hombría. Entre el público había niños, adultos, adolescentes, jóvenes, abuelos, tíos, primos... Algunos, disfrazados a lo "Gaga"; otros, en forma casual.

"Dance in the Dark", "The Fame" y "Boys Boys Boys" calentaron el ambiente, mientras que con "Just Dance", "Telephone" (sin Beyoncé), "Poker Face" y "Bad Romance", los truenos y las centellas en medio de las nubes lucieron pálidos comparados con la euforia de la gente.

"Soy como Campanita, si no aplauden me muero, así que, por favor, 'pequeños monstruos', apláudanme", expresó a mitad del espectáculo, tirada en el suelo.

Habló entre cada canción y no se cansó de promover su nuevo disco, Born this Way, ni de repetir "Mexico City".


"A todos esos que dicen que hago playback, que no canto en vivo, ¡tomen! ¡Escúchenme con atención! No sé de dónde sacan eso.

Si no soy perfecta, lo sé, jamás he vendido esa pinche idea, pero jamás, escúchenme bien, todos escuchen, haré playback, porque yo respeto mucho a quien compra un boleto para verme en vivo y no le daría porquerías", manifestó.

El remate del espectáculo lo brindó con las nuevas "Born this Way" y "Judas", y se echó al público al corazón y las entrañas; entonces mencionó una gran sorpresa en su visita al País.

"No puedo creer que aquí, en México, vendan el tequila en lata, es una de las grandes maravillas del mundo, uno de mis grandes descubrimientos en este maravilloso viaje a México.

Siempre quiero mi tequila en lata, qué gran invento, estoy pensando, sí, estoy pensando en llevarme muchas cajas de tequila enlatado, ¿me dejarán pasar en aduana?", gritó.

Y así, tras sus caracterizaciones, en las que pasó de monstruo a monja freak o a vampiresa, se despidió del público mexicano y de su gente, ya que fue el último espectáculo que dio en esta gira.

Después del epílogo a su Monster Ball Tour, Lady Gaga se retiró del Foro Sol a la medianoche del viernes para tomar un vuelo particular con destino, al parecer, a Estados Unidos.

A bordo de una Suburban negra, y en un convoy junto a otras cinco, la caravana donde iba la intérprete cruzó la caseta de pago hacia Toluca una hora después de haber abandonado el recinto, en el oriente de la Ciudad de México.


La visita anterior de Gaga a México

LE ENTRA A LA COMIDA MEXICANA

-Lady Gaga comió dos horas antes del show del viernes, el tiempo límite que su instructora de ejercicio le permite.

-Arroz al vapor, una enchilada de mole, ensalada de pollo y un flan de elote fue todo lo que comió.

-Entre sus canciones ingirió agua natural y bebidas rehidratantes con sabor a ponche.

-En el trayecto de su hotel al Foro Sol tomó, con su BlackBerry, imágenes de fans y calles para su álbum del recuerdo.

Rayos! lo que la gente investiga, a mí no me gusta estar pendiente de esos detalles, pobre Gaga, hasta se fijan en que come, en fin, habrá algunos little monster que quizá les gusta saber estos detalles. Siempre te llevaremos en el corazón y esperaremos ansiosos a tu siguiente visita!

La Casa de Gaga.